Historia del Golden Retriever

El Golden Retriever es el más popular de los Retrievers. Su ascenso en el número de inscripciones en el LOE es imparable en los últimos años, siendo una de las razas con mayor número de cachorros nacidos. La gran virtud de los Golden Retriever es sin duda su carácter bondadoso, confiado, alegre, activo, familiar, en resumen un amor de perro. Si a todo esto le sumamos su inigualable belleza, sobre todo debido a su precioso manto, cabeza y estructura,  explica perfectamente su enorme popularidad. Sin olvidar que es un perro de cobrador de caza, es ideal para detección de explosivos, drogas y personas, perros lazarillo, minusválidos, deportistas, terapia, etc..

Es  un perro familiar, muy sensible, que lo hace inapropiado para guarda o para estar relegado en una finca. No es apto para un trato brusco o excesivamente severo.

Su gran pasión es indudablemente el agua, incansable nadador, disfrutará enormemente cuando lo llevemos al mar o al rio,

Como empezó todo

El Golden Retriever puede seguir el rastro a sus ancestros hasta llegar a una única camada y al primer par de Retriever amarillos llamados «Golden» (dorados). Los amantes de los perros están en deuda con un escocés: Sir Dudley Marjoriebanks, el primer lord Tweedmouth of Guisachan, de Inverness (Escocia), que fue el primer «criador» de nuestro perro dorado.

Como era típico en el siglo XIX, Tweedmouth era un ávido cazador y un entusiasta de las aves acuáticas. Su pasión como cazador era igualada, únicamente, por su dedicación a los perros de caza, y había tenido y criado Beagle, Pointer, Setter, Greyhound, Deerhound Escoceses y Water Spaniel Irlandeses.

Durante los años 1850, centró su atención hacia las variedades de tamaño mediano de perros cobradores de caza (retriever), que eran los «perros de agua» de esa época. De esos perros se sabía que eran combinaciones deseables entre Setters y Spaniels con otras variedades de perros de trabajo. Tenían un gran coraje, fuerza, sagacidad y temperamento y, no sorprendentemente, un olfato superior. Aunque el color carecía de importancia para la mayoría de los cazadores, que comprensiblemente se preocupaban más por las habilidades de trabajo, Tweedmouth fue un verdadero vanguardista en su tiempo y se mostró inclinado hacia la cría de una línea de perros de color amarillo.

Historia del Golden Retriever

Durante muchos años, el mundo de la cinofilia se acogió al mito de que Tweedmouth se había hecho con sus primeros perros amarillos a partir de un grupo de perros de un circo ruso. Esta fábula fue desmentida por la ya fallecida Elma Stonex, de Somerset (Inglaterra), reconocida jueza y criadora de los Golden Retriever Dorcas, una verdadera autoridad dentro del mundo de los Golden Retriever que investigó y desveló la auténtica historia de la raza.

En un artículo aparecido en la revista Dog World, Mrs. Stonex recuperó una información publicada en 1952 y en 1953 en la revista Country Life. Con la contribución del sexto conde de Ilchester, un renombrado historiador y cazador, los artículos desvelaron los registros de las camadas llevadas a cabo por su tío abuelo, lord Tweedmouth, en el criadero que tenía en su finca de Guisachan.

Estos registros, que datan de 1835 hasta 1890, no contienen referencia alguna a perros de origen ruso. Los registros indicaban que Tweedmouth adquirió su primer Retriever amarillo en Brighton, en 1865, que el perro se llamaba Nous (palabra griega que significa sabiduría) y que procedía de una camada donde el resto de los animales eran Retriever completamente negros con el pelaje ondulado (Curly-Coated Retriever).

Registrada como raza por el conde de Chichester, Nous aparece en fotografías de 1870 como un perro grande y hermoso con un pelaje muy ondulado y de un color ni claro ni oscuro y que se parecía mucho al Golden Retriever actual.

Dos años más tarde, un primo de Tweedmouth, David Robertson, le trajo una Tweed Water Spaniel llamada Belle. David vivía en Ladykirk, a orillas del río Tweed, y el Tweed Water Spaniel era el perro de caza preferido en esa región. Los historiadores describen al Tweed Water Spaniel como un «pequeño Retriever inglés de color hígado» (el color hígado significa todos los tonos de color rojizo, leonado o marrón), un perro con un pelaje con unos rizos muy cerrados, presunto descendiente de los «perros de agua» obtenidos a principios del siglo XIX. Belle estaba destinada a convertirse en la base del plan de Tweedmouth para desarrollar una raza para el cobro de la caza de color amarillo.

En 1868, la ahora famosa camada entre Nous y Belle dio como resultado cuatro cachorros amarillos a los que Tweedmouth llamó Ada, Cowslip, Crocus y Primrose. Se quedó con Cowslip para continuar con su objetivo de criar perros de color dorado para cobrar la caza, y regaló los otros tres a parientes y amigos que compartían su sueño de conseguir perros amarillos de categoría superior. Ada fue dada a su sobrino, el quinto conde de Ilchester, que fundó la línea Melbury de Retriever y que frecuentemente cruzó a su progenie amarilla con Labradores y otros perros de pelaje ondulado (Curly-Coat).

En 1873 Cowslip fue cruzada con otro Tweed Water Spaniel, también cedido por David Robertson, y Tweedmouth se quedó con una perra a la que llamó Topsy. Tres años más tarde, Topsy parió a Zoe, que más adelante fue cruzada dos veces con Sweep, descendiente de Ada y criado por lord Ilchester. En 1884, Zoe crió otra camada, cuyo padre era Jack, otro de los hijos de Cowslip, cuyo padre fue (en 1876) un Setter rojo. Esta camada dio lugar a un segundo Nous, que es el último eslabón entre las crías de Tweedmouth y los Golden Retriever de hoy día.

Este segundo Nous fue cruzado con una perra llamada Queenie, que descendía de una hermana de Nous y de un macho negro de pelaje liso (Flat-Coat). Dos cachorros, Prim y Rose, que sin duda obtuvieron sus nombres de sus ancestros separados por algunas generaciones, se cree que se hallan detrás de los dos primeros Golden Retriever inscritos en el Kennel Club.

Esta última camada proveniente de Nous y de Queenie, y que fue inscrita en 1889, muestra cuatro líneas diferentes retrocediendo hasta Cowslip, cinco generaciones atrás. El cruce dentro de una misma línea era muy inusual en aquellos tiempos, así que Tweedmouth fue un verdadero pionero en su tiempo.

Mientras que leer que los «perros A y B» cruzados con los «perros C y D» y todo lo demás puede resultar algo aburrido, estos importantes registros detallados nos revelan cómo el color amarillo de la capa del Golden Retriever se convirtió en la marca de fábrica de la raza. El segundo lord Tweedmouth continuó con el sueño de su padre y crió Retriever amarillos hasta que Guisachan fue vendido en 1905, y para nuestra tristeza, no conservó registros de sus cruces.

La última conexión entre los Retriever amarillos de Tweedmouth y los actuales pedigrees de Golden Retriever está contenida en una carta que aquél envió a su hija Marjorie, lady Pentland, escrita por John McLennan, uno de los cuidadores de Guisachan. McLennan tenía una camada de cachorros de una hija de Lady, una perra propiedad del Honorable Archie Marjoriebanks, que era el benjamín de Tweedmouth. En la carta, McLennan decía que había vendido dos cachorros al primer vizconde de Harcourt, fundador del famoso criadero Culham, cuyos perros están detrás de toda la raza Golden Retriever. Se cree que esos dos cachorros eran descendientes de Prim y de Rose y que fueron los animales fundadores de la línea Culham.

Lord Harcourt era un importante criador en aquellos primeros años del Golden Retriever, y fue su primer exhibidor en Inglaterra (entonces se conocían y eran registrados como Perros de pelaje liso y de color dorado, o Flat-Coats, Golden) en la exposición celebrada en Crystal Palace en 1908. Sus grandes perros Culham Brass y Culham Copper (1905) fueron inscritos en el libro de orígenes del Kennel Club en 1903 y en 1905.

En 1906, a lord Harcourt se le unió en el ring Winifred Maude Charlesworth, la más notable de entre los primeros aficionados a los Golden Retriever. Mrs. Charlesworth se pasó 50 años criando, adiestrando y haciendo campaña en favor de sus queridos Golden Retriever.

Ella fue la responsable de la formación del Golden Retriever Club en 1913, y durante muchos años actuó como Secretaria Honoraria del Club. Ese mismo año y gracias de nuevo y en gran medida a los esfuerzos de Mrs. Charlesworth, a los Golden Retriever se les concedió su propia categoría y fueron registrados como «Retriever dorados (golden) o amarillos». El término «amarillo» se dejó de usar en 1920.

La importancia de Mrs. Charlesworth para con los Golden Retriever es legendaria entre los amantes de esta raza. Sus cruces bajo el afijo Normanby (más tarde cambiado a Noranby) con los famosos perros de lord Harcourt aparecen en todos los pedigrees actuales del Golden Retriever. Esta mujer tenía una personalidad dinámica y su dedicación a la raza asentó al Golden Retriever como perro de primera categoría dentro del mundo británico de los perros cobradores de caza. Activa tanto en las pruebas de campo como en las de belleza, Mrs. Charlesworth se dedicó a conservar el Golden Retriever de trabajo, que combinaba tanto belleza como solidez. Sus perros eran sólidos y con una estructurafuerte, tenían hermosas cabezas y se ganaron los honores en las exposiciones de belleza y en el campo. Su energía y su entusiasmo en ambos eventos dieron fama al Golden Retriever de ser un perro de caza muy eficiente y que estaba a la altura de los otros cobradores de la caza de esos tiempos. En su libro de 1933, agradece a lord Tweedmouth que fuera el instrumento para la obtención de su primer Golden Retriever, Normanby Beauty, que conduce al lector a pensar que esa perra procedía directamente de una camada de Tweedmouth. Las primeras camadas de Beauty tuvieron como machos a perros Culham. Mucha de esa descendencia: Normanby Balfour, Chs. Noranby Campfire (el primer Golden Retriever que ganó un título de belleza), Noranby Daydawn, Noranby Jeptha, Noranby Diana, Noranby Dutiful y Noranby Dierdre, Ch.-F.T.Ch. Noranby Destiny… fueron influyentes antepasados de esta raza.

Mrs. Charlesworth ya era septuagenaria cuando Destiny se alzó con su doble campeonato en 1950. A principios de los años 1900, los Retriever de todos los colores compitieron en los encuentros de pruebas de campo. En 1904, la Liga Abierta Internacional de Perros de Caza (con apuestas) fue ganada por un perro de color hígado y pelaje liso, que constaba como hijo de Golden Flatcoat Lucifer, propiedad de lord Tweedmouth. Éste fue un triunfo que muchos historiadores dicen que podría haber sido la primera victoria en una prueba de campo por parte de un Golden Retriever. Es importante recordar que muchos de los Golden Retriever de esos tiempos competían en las pruebas de belleza, además de lograr triunfos en las de campo. Los campeones de belleza solían obtener buenas clasificaciones en las pruebas de campo o Certificados de Mérito (recomendaciones por un trabajo excelente) y la raza fue enormemente popular como perro compañero dentro de la comunidad de los cazadores. Aunque no destacaban por su rapidez, eran conocidos por sus excelentes aptitudes acuáticas, y también por su obediencia y su temperamento superiores. Estas mismas características describen al Golden Retriever del siglo XXI.

Las exposiciones de Campeonato y las pruebas de campo se detuvieron bruscamente durante la segunda guerra mundial, y sólo unos pocos criadores mantuvieron líneas de calidad. De todas formas, la cría de perros mascotas prosperó en los años posteriores a la guerra y el número de Golden Retriever nacidos se incrementó gradualmente cada año. Hacia los años 90, quedaron en cuarto lugar en el total de inscripciones en el Kennel Club.